Y nop, no es que ya me dedique a esa lucrativa actividad, lo que pasa es que me lancé desde la tercera cuerda, cual vil Perro Aguayo, junto con CoryconR con rumbo a Reforma.
Y ahí anduvimos, paseando a pata limpia después de una visita al Museo de Arte Moderno y a su tienda, donde nos dio compulsión por comprar postales. Ahí anduvimos decía, paseando entre bancas, unas raras, ostras chidas, algunas extrañas y una asesina.
La banca musical: Tiene el respaldo con claves de sol y fue la primera que divisé en la lejanía, Cory me dijo pacheco porque ella, nomás no la miraba, pero yo, ojos de azor, pos si.
La banca con senos: Fue la primera en la que nos sentamos y Cory dice que es cama. Le agarré una chichi. A la banca.
La banca manotas: Cory se quería sentar a juerzas en ella. Oh, si quieres unas manotas en el trasero, haberlo dicho antes.
La banca ¿y este wey?: Tiene una silueta recortada en su suerficie, platiqué con ella sobre qué se sentía ser banca y que todos te las pongan, pero el señor silueta, muy respetuoso y caballeroso, no respondió para no quedar mal con las damiselas que se le han sentado.
La banca premio eres: Tiene un apéndice al lado izquierdo si es que estás sentado, derecho si la ves de frente, que es una esculturita, pero es idéntico a algún premio de aquella revista juvenil.
La banca remembranza del 85: Tiene tres niveles banqueriles y si te vas al último se mueve y se siente como se sintieron los edificios en Septiembre de aquel año, fue de las favoritas de propios y extraños.
La banca pastote: Son ¿hojas? ¿espigas? o no se que fregados de pasto súper desarrollado que crecieron y se metalizaron y agarraron un aire banquiforme.
La pájara banca: De hecho así se llama y es una palomota que deja que te subas a sus planos lomos... ¿las palomas tienen lomos?
La bancarreta: Con caballito rampante y toda la cosa.
La tremenda banca asesina: Machuca las pobres pantorrilas de novias sentadas en ellas cuando el novillo se baja. Cory sufrió, lloró, se lamentó, me la mentó, pero continuó el recorrido. Tiene forma de sube y baja.
Banca sillón: Si quiere usted almorranas o nomás darse una tatemadita de nalgas, siéntese en ella a medio día con el señor Sol en todo lo alto.
La banca pareja: Es una banca con la forma de dos siluetas que son una pareja, por ningún motivo me permití sentarme en la silueta hombre, neeeeeeeel, la Cory dijo, ¡Yo si! ¡Yo si!
Banca rueda: Tubos en forma de círculo, simpática y de las que más nos gustaron.
Bancarta: En esta banca un extranjero le dijo a una paisana que le sacara foto y la muy sopenca nomás le tiró su cámara, jajajaja, no sabía donde meter la cabeza... Hay, disculpe señor, No habiendo problemou, no pasa nadau, Hay no, perdón. Jajajajajaja.
Banco barco: Simple pero llamativa. Para que no se hunda deben sentarse uno en la proa y otro en la popa... Adivinen adivinadoras, cuál es cuál, proa y popa, adelante o atrás.
Bancabeza: Una pareja que se trae por las nubes y cabeza abajo.
Banca del petate del muerto: Tiene dos crucecitas y te puedes acostar y hacerte el morido o dormirte.
Bancubitos: Te sientas al lado en el piso y de haces tiliche (diría mi hermana) y pareces el títere junto a los dados.
La Hipobanca: Ahhhh, un hipopotamote con bujeros en las lonjas pa’dejarte sentar.
Me latió, es un buen pretexto para pasear, convivir, disfrutar el méndigo solezote de invierno y terminar comiendo un subway.
Frodo paseador y banquero.
Y ahí anduvimos, paseando a pata limpia después de una visita al Museo de Arte Moderno y a su tienda, donde nos dio compulsión por comprar postales. Ahí anduvimos decía, paseando entre bancas, unas raras, ostras chidas, algunas extrañas y una asesina.
La banca musical: Tiene el respaldo con claves de sol y fue la primera que divisé en la lejanía, Cory me dijo pacheco porque ella, nomás no la miraba, pero yo, ojos de azor, pos si.
La banca con senos: Fue la primera en la que nos sentamos y Cory dice que es cama. Le agarré una chichi. A la banca.
La banca manotas: Cory se quería sentar a juerzas en ella. Oh, si quieres unas manotas en el trasero, haberlo dicho antes.
La banca ¿y este wey?: Tiene una silueta recortada en su suerficie, platiqué con ella sobre qué se sentía ser banca y que todos te las pongan, pero el señor silueta, muy respetuoso y caballeroso, no respondió para no quedar mal con las damiselas que se le han sentado.
La banca premio eres: Tiene un apéndice al lado izquierdo si es que estás sentado, derecho si la ves de frente, que es una esculturita, pero es idéntico a algún premio de aquella revista juvenil.
La banca remembranza del 85: Tiene tres niveles banqueriles y si te vas al último se mueve y se siente como se sintieron los edificios en Septiembre de aquel año, fue de las favoritas de propios y extraños.
La banca pastote: Son ¿hojas? ¿espigas? o no se que fregados de pasto súper desarrollado que crecieron y se metalizaron y agarraron un aire banquiforme.
La pájara banca: De hecho así se llama y es una palomota que deja que te subas a sus planos lomos... ¿las palomas tienen lomos?
La bancarreta: Con caballito rampante y toda la cosa.
La tremenda banca asesina: Machuca las pobres pantorrilas de novias sentadas en ellas cuando el novillo se baja. Cory sufrió, lloró, se lamentó, me la mentó, pero continuó el recorrido. Tiene forma de sube y baja.
Banca sillón: Si quiere usted almorranas o nomás darse una tatemadita de nalgas, siéntese en ella a medio día con el señor Sol en todo lo alto.
La banca pareja: Es una banca con la forma de dos siluetas que son una pareja, por ningún motivo me permití sentarme en la silueta hombre, neeeeeeeel, la Cory dijo, ¡Yo si! ¡Yo si!
Banca rueda: Tubos en forma de círculo, simpática y de las que más nos gustaron.
Bancarta: En esta banca un extranjero le dijo a una paisana que le sacara foto y la muy sopenca nomás le tiró su cámara, jajajaja, no sabía donde meter la cabeza... Hay, disculpe señor, No habiendo problemou, no pasa nadau, Hay no, perdón. Jajajajajaja.
Banco barco: Simple pero llamativa. Para que no se hunda deben sentarse uno en la proa y otro en la popa... Adivinen adivinadoras, cuál es cuál, proa y popa, adelante o atrás.
Bancabeza: Una pareja que se trae por las nubes y cabeza abajo.
Banca del petate del muerto: Tiene dos crucecitas y te puedes acostar y hacerte el morido o dormirte.
Bancubitos: Te sientas al lado en el piso y de haces tiliche (diría mi hermana) y pareces el títere junto a los dados.
La Hipobanca: Ahhhh, un hipopotamote con bujeros en las lonjas pa’dejarte sentar.
Me latió, es un buen pretexto para pasear, convivir, disfrutar el méndigo solezote de invierno y terminar comiendo un subway.
Frodo paseador y banquero.